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¿Cómo lograr un estilo nórdico en mi hogar?

El protagonista del estilo nórdico es la naturaleza, por lo que la madera va a ser la pieza clave de la decoración en los interiores, acompañada de materiales naturales como el lino, algodón o lana ideales para vestir el hogar.

La intención de incorporar estos materiales es recrear lugares cálidos, relajantes y funcionales. El estilo nórdico busca aportar con la decoración que las áreas tengan un mayor espacio visualmente, para que la luz natural esté presente en todas partes.

¿Qué es el estilo nórdico?

El estilo nórdico es uno de los más populares del mundo. Procede de los países nórdicos, en concreto de Dinamarca, Finlandia y Noruega, y se basa en el uso de elementos prácticos y funcionales a la hora de amueblar la casa. También busca ambientes cálidos y luminosos, algo normal si piensas que, en esos países, los días son más cortos que aquí. Y esto lo consiguen con el uso del color blanco como base y las maderas claras para dar calidez.

Historia del estilo nórdico

Los orígenes del estilo nórdico se remontan a fines del siglo XIX en los países del norte de Europa, principalmente Suecia, Noruega, Finlandia y Dinamarca. La propia idiosincrasia de aquellas tierras, con pocas horas de sol y mucho frío, dieron lugar a los rasgos principales de este tipo de decoración. También influyó el aprovechamiento de los elementos que tenían a su alcance.

Por una parte, se buscaba que las casas fueran lo más luminosas posible para soportar mejor las largas noches. Y, por otra, se optaba por muebles funcionales y duraderos que resistieron bien las bajas temperaturas. Para crearlos se utilizaba la madera, una materia prima muy abundante en unos países donde abundan los bosques.

Ya en el siglo XX, las vanguardias artísticas influyeron en el estilo nórdico. Los diseñadores escandinavos añadieron elementos más modernos y, con ello, este tipo de decoración ganó fama en todo el mundo. Sin embargo, nunca perdió su esencia y sus rasgos originales, ni siquiera en la actualidad.

Estilo nórdico diseño de interiores: los mejores tips para tu hogar

Para tener tu casa un con un estilo nórdico en diseño de interiores, tendrás que empezar por prescindir de todos los muebles que no tienen un uso. Lo que no tiene uso sí o sí debe ir fuera. 

Uno de los detalles más importantes es elegir colores que multipliquen la luz para las tapicerías y las piezas grandes, como el sofá, mientras que los muebles pueden ser de madera. 

Pero una de las mejores opciones es elegirlos de roble o fresno, maderas claras pero de calidad. Conseguirás un estilo nórdico de manera sencilla y con un resultado fresco, cálido y acogedor.

Características del estilo nórdico

Uso de la luz

El uso de la luz es clave para lograr una amplitud que en combinación con el color blanco el cuál es uno de las características del estilo nórdico, donde multiplica la claridad a toda costa, por lo que quedan terminantemente prohibidas las telas tupidas en cortinas.

Blanco como protagonista

Presente en paredes, muebles, complementos, e incluso en el suelo, el estilo nórdico hace uso de él en su tono más cálido. Los toques de color se añaden mediante los complementos, los textiles, las lámparas o incluso los cuadros. El contraste absoluto con el negro y otros tonos más cercanos como el gris y el beige serán muy apreciados en este estilo.

Uso de madera

No sólo en suelos, paredes y muebles, sino también en todo tipo de complementos, desde portavelas hasta accesorios de mesa. Aparte del mobiliario, puedes emplearlo en todo tipo de complementos.

Muebles funcionales

Debes ser muy pragmático a la hora de elegir los muebles, pues se debe usar mobiliario sencillo y de líneas rectas y depuradas, combinadas con suaves curvas y líneas orgánicas. 

Combina un poco de minimalismo, vintage e industrial

Los ambientes nórdicos siempre admiten otras piezas decorativas y muebles de un aspecto vintage o industrial. De esta forma, harás que la decoración sea más personal y conseguirás un ambiente más acogedor. 

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Un toque de naturaleza

Añade un toque vegetal en la decoración de tu casa, sobre todo en los baños. Una planta siempre otorga alegría y calidez a un ambiente de tu casa.

Sala estilo nórdico

Las salas de estilo nórdico son sencillas por lo general se combinan con el estilo minimalistas, ya que tienden a ubicarse en espacios luminosos con muchos rasgos naturales.

Para lograr un estilo nórdico puedes mezclar texturas y apostar por colores claros sin caer en la saturación, con piezas sencillas en madera. Este estilo se basa más en la calidad que en la exagerada cantidad de muebles innecesarios para una linda decoración.

  1. Muebles de madera para generar calidez

La madera en su color natural contribuye a crear ambientes cálidos sin perder la elegancia, además de la calidad de este material su funcionalidad y resistencia son de gran valor.

Este material es sin duda la pieza clave en el estilo nórdico, si es en tonos naturales se convierte en el elemento estrella de este tipo de decoración. En cuanto al diseño se pueden usar muebles de madera de líneas rectas y depuradas, sencillos pero elegantes.

  1. Aprovechar bien la luz

Se debe facilitar que la luz llegue a cada rincón y así generar mayor amplitud en cada espacio, para ello se debe aprovechar al máximo la luz natural. También para aquellos rincones donde no llegue la luz natural, el uso de lámparas es válido pero sin recargar el ambiente recuerde que las salas de estilo nórdico se caracterizan por pocos elementos.

  1. El blanco para un espacio tranquilo

La tendencia del blanco nunca deja de ser, este tono no solo potencia la luz sino que es de múltiples combinaciones y el protagonista de las salas nórdicas. Las paredes en blanco se combinan con distintos elementos, también puedes optar por este tono para los muebles y lo complementas con cojines en diversos colores.

  1. Butacas que realcen tu sala

Unas butacas en diseños ligeros son el complemento ideal para este tipo de decoración, hay colores y materiales que nunca pasan de moda y uno de ellos es el mostaza, es uno que destaca la decoración en cualquier ambiente.

  1. Elementos con motivos geométricos

Los motivos geométricos son de uso frecuente en la decoración nórdica, una idea creativa es una alfombra en blanco y negro con motivos geométricos. Los espejos en forma geométrica son otros aliados para este estilo y ayudan a proyectar la luz y a brindar sensación de amplitud.

  1. El protagonismo de la madera en los pisos

La madera es el material por excelencia para crear ambientes cálidos y confortables, su gran capacidad de aislante térmico le permite ser muy útil para este estilo. Los pisos en madera con acabados naturales son la sensación para las salas de estilo nórdico. Las de pino o de roble son muy recomendadas por los diseñadores de interiores.

  1. La incorporación del mármol en el estilo nórdico

Este material le brinda una buena dosis de elegancia al ambiente, una mesa de centro con encimera de mármol es el complemento ideal para un espacio sofisticado. En combinación con otras piezas el mármol garantiza resistencia lo cual te permite adquirir piezas atemporales.

  1. Ilumina con una paleta de colores pasteles o neutros

Añade a tu sala el estilo nórdico con colores que transmitan paz, felicidad y mucha iluminación como los neutros o pasteles, una hermosa combinación del rosa con el blanco para un ambiente romántico no te dejará mal parado. Si deseas calidez el beige o gris suave con blanco también es un dúo que no falla en este estilo.

Motivos para elegir el estilo nórdico y renovar tu hogar

Brinda luminosidad a los ambientes

El estilo nórdico se caracteriza por la decoración en colores claros, sobre todo en color blanco, por lo que ayuda a brindar luminosidad a los espacios. Es un estilo a elegir sobre todo en aquellos ambientes pequeños ya que genera una sensación de mayor amplitud. Los colores claros potencian la luz natural y la claridad por lo que también es una excelente alternativa para ambientes poco iluminados.

Líneas sencillas y elegantes

Los muebles de estilo nórdico se caracterizan por tener líneas rectas y simples, sin duda alguna el motivo principal por el cual se adaptan fácilmente a cualquier ambiente y decoración. 

La sencillez de las líneas da como resultado piezas simples pero muy elegantes que no necesitan de mucho más para ambientar un espacio y darle estilo. Los diseños son sobrios y con colores que combinan a la perfección con todo tipo de estampas y colores y con objetos de diferentes estilos.

Son atemporales

Una de las características principales del estilo nórdico y por el cual tiene tanta aceptación, es que los materiales que utiliza y los colores hacen que los muebles sean atemporales. La madera y el color blanco son los materiales predominantes del estilo nórdico, y son opciones que siempre son tendencia. 

Decorar un ambiente con este estilo o adquirir un mueble nórdico es una buena alternativa porque es una tendencia atemporal y que siempre va a estar vigente, ya sea por sí sola o en combinación con otros estilos.

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